Para el especialista en materias de transmisión y distribución de energía eléctrica, la región de Coquimbo no debería autoabastecerse de energías en un 100%, pues no se cumpliría con el propósito de un sistema interconectado como el chileno.
Una exposición respecto a los principales desafíos del Sistema Interconectado Central (SIC) en el norte de Chile, tales como la necesidad de aumentar la capacidad de transmisión, mejorar algunos tramos congestionados o evitar el desacople entre los precios de la energía entre el norte y el sur, realizó Gerardo Barrenechea, Director de Estudios de la Asociación Gremial de Empresas Eléctricas A.G. (EEAG), ante el Directorio Regional de Energía, en su sesión del pasado martes 30.
La Asociación representa a las empresas de distribución y transmisión de energía eléctrica en Chile –Transelec, Saesa, CGE y Chilquinta- y su objetivo principal es lograr un desarrollo apropiado de todo el sistema eléctrico, tanto como poder de compra (distribuidoras) como transportadores del suministro eléctrico (transmisoras).
En múltiples ocasiones e instancias, tales como el Directorio Regional de Energía, se ha mencionado la necesidad urgente de aumentar y fortalecer las líneas de transmisión de energía eléctrica, ante lo cual Barrenechea manifiesta que el diagnóstico que se realiza en la actualidad es «crítico». A pesar de ello, se ve con bastante optimismo, pues respecto al sistema troncal de transmisión –de mayor voltaje- existen algunas ampliaciones y mejoras en carpeta, con lo cual si bien faltan algunos años por vivir con «desacoples» y precios altos en la región de Coquimbo, existirá un cambio favorable en dicha situación.
En este sentido opera principalmente el proyecto de Ley de Concesiones Eléctricas aprobado en general por la Sala del Senado este martes 30 de abril, pues evitaría dilatar la realización de proyectos, materia en la cual las empresas que presentan las iniciativas tienen una gran responsabilidad, pues «para que la región de Coquimbo no tenga problemas de transmisión, es necesario que los proyectos que hoy hay en carpeta se realicen, facilitando el camino».
Consultado por las implicancias en materia de transmisión y distribución eléctrica de los contratos de generación eléctrica que algunas compañías mineras regionales han suscrito con generadoras eólicas, de biogás o solares, Barrenechea comenta que «lo que se necesita para tener un sistema apropiado, es saber cómo evolucionará la demanda energética y los proyectos. Una empresa de subtransmisión debe tener certeza de cuándo y en qué magnitud van a ser las necesidades que requerirá un industrial o un minero, y cuáles son los proyectos de transmisión que habrá en la zona». Para contar con dichas certezas, la EEAG propuso al Directorio Regional de Energía llevar un catastro de los proyectos mineros y energéticos, su evolución y si realmente se están concretando.
AUMENTAR EL PORCENTAJE DE ERNC, SIN AUTOABASTECERSE
En su presentación ante el Directorio Regional de Energía, Barrenechea señaló que, más allá de estar lo suficientemente consolidada en materia de proyectos de Energías Renovables no Convencionales (ERNC), la región de Coquimbo debe plantear abastecerse en un mayor porcentaje de estas fuentes, lo cual no implica que la zona se autoabastezca de energía, pues no es el objetivo en un Sistema Interconectado como el chileno.
Respecto a dicha afirmación y al concepto que se tiene de nuestra zona como un «modelo a seguir» para otras regiones del país en la incorporación de energías limpias, Barrenechea manifiesta que «el mensaje es hacer que la región, por ejemplo, se pueda convertir derechamente en una capital de las ERNC, pero sin necesidad de hacerse cargo de diversificar la matriz nacional». En este sentido, el aspecto más relevante, a juicio del Gerente General de la EEAG es que la región de Coquimbo –y en general, todas las regiones- debe contar con fuentes que obedezcan a sus propias necesidades, complementando desde una perspectiva local, con la generación solar y eólica, las otras fuentes presentes a lo largo del país.
