El director ejecutivo de la Asociación de Empresas Eléctricas dice que “estamos muy alineados con la estrategia que ha dado a conocer el gobierno”.
Uno de los mayores dilemas de las distribuidoras es que sus tendidos eléctricos deben abrirse paso por lugares de difícil acceso, pero también por zonas que pueden motivar el rechazo de las comunidades aledañas. Por lo mismo para la industria resulta fundamental una política que integre la obra con los vecinos a fin de prevenir eventuales conflictos.
¿Qué puntos resultan vitales para las distribuidoras y que debieran estar presentes en la nueva agenda de energía?
Si tuviera que resumir el mensaje, tenemos una enorme confianza en el actual gobierno. Confiamos en las autoridades, y en cómo han manejado el tema. Creemos que el ministro Máximo Pacheco tiene un nivel de entendimiento amplio sobre la problemática energética.
En todas las instancias en que nos hemos reunidos hemos podido confirmar esto.
Coincidimos en las prioridades que el propio ministro Pacheco ha venido expresando en distintas instancias.
¿Cuáles son esas coincidencias?
Creemos que debe haber un aumento en la oferta de generación. Ese debe ser el punto medular. Esto, obviamente implica un mayor número de actores y más entendimiento. En segundo lugar que para lograr ese objetivo, un punto fundamental es establecer un ordenamiento territorial, lo que hace que el Estado colabore. Esto último particularmente en la transmisión eléctrica con señales indicativas en la planificación, pero también en el uso de las distintas herramientas de la política pública. Es decir bajo una lógica de aumento en la oferta en general y un aumento en la oferta nueva en particular. Luego vienen otros temas que también son igualmente relevantes, como la eficiencia energética y la promoción de las energías renovables no convencionales.
Otro tema que debe ser abordado son los mejoramientos en los proceso de licitación, lo que nos interesa mucho. Por lo tanto, creemos que estamos muy alineados con la estrategia que ha dado a conocer el gobierno. Desde el punto de vista de las soluciones que se están contemplando eso es algo que desconocemos a la fecha y estamos muy expectantes a que se dé a conocer la agenda energética.
Cuando se habla de entregar compensaciones a la comunidad donde se levantan proyectos. ¿Son partidarios de esta medida?
Yo junto dos temas: ordenamiento territorial y lo que he llamado justicia territorial. En el elemento de justicia territorial o de valor compartido, que me gusta más que compensaciones, concordamos con ese criterio, pero creemos que hay mucho por discutir. Aquí hay muchas herramientas para llevar a cabo esta idea, pero concordamos con el gobierno en el sentido de este mecanismo de compartir valor.
¿Las distribuidoras se sienten escuchadas en esta discusión por la agenda energética?
Definitivamente. Como nunca antes hemos sido escuchados, al menos en mi experiencia en el sector, esta agenda ha sido construida, escuchando a todo el mundo.
Esto tanto por la vía de aceptar reuniones que son citadas, como por las actitudes proactivas del gobierno de generar una instancia para el diálogo en la discusión.
Desde hacía mucho tiempo que el gobierno no tenía un nivel de diálogo multisectorial, que como lo había tenido hasta ahora.
Sí, pero una cosa es ser escuchado y otra que se acojan las ideas.
En lo que se refiere a los efectos en carácter tributario al menos como distribuidores hemos decidido en forma estructural que es un tema que debe ser calculado por la Comisión Nacional de Energía. Por responsabilidad no nos vamos a referir a los efectos tarifarios que hay en obra gruesa.
Ese es un punto ampliamente discutido por las generadoras.
